¿QUIÉN SE APUNTA AL JUEGO DE LA BLOGUERA INVISIBLE?

Bueno, la cosa se está liando mucho y creo que es hora de recapitular con el juego del amigo invisible del blog, al que desde ahora llamaremos "la bloguera invisible" para diferenciarlo de la otra, de la tradicional "amiga invisible".

Os recuerdo lo que dijo nuestra "anónima 1", verdadera artífice de esta idea, nuestro invisible duendecillo navideño al que también deberíamos regalar algo por tener tan buena idea:

¡SOY TU AMIGA INVISIBLE!
Sí, de ti, de la que me lee ahora.
Y te escribo para proponerte a ti, y a tus amigas, que aprovechando este juego del amigo invisible os animeis a “regalaros” algo especial… tan especial que lo verdaderamente especial sea –dada las fechas- el regalaros en vuestro propio árbol... Y qué mejor árbol que éste que ya teneis, vuestro blog. Estoy segura que cualquier detallito dirigido a la amiga que te toque regalar puede ser un magnífico regalo si se lo encuentra envuelto aquí. Un mágnífico regalo para ella, un magnífico regalo para todas, y un magnífico regalo para este –magnífico- blog.

No hace falta rebuscar en el monedero. Ni dejarse los tacones recorriendo escaparates. Ni tan siquiera unas tijeras o el consabido lacito… Piensa en tu amiga, y en un minuto, no más, seguro que eres capaz de dirigirte a ella y escribirle al menos alguna palabra, sólo una, y hasta de marcar el circulito para publicarla como anónimo (recuerda, eres invisible)… y si no te sale, prueba otra vez, al menos, inténtalo otro minuto más.

(Sí, claro,… te hace falta un ordenador e interné… pero si me estas leyendo…)

Podriais aprovechar vuestra cena del día 3 para repartiros los “papelitos” de quién os toca regalar… Y hasta nochebuena... ¡a decorar vuestro árbol colocando vuestros regalitos....!

¿Qué te parece?

Y ahora, contestando a anónima 1, ¡nos parece muy bien! Seguimos muy intrigadas por tu identidad, pero has tenido una idea tan buena que tu identidad es lo de menos ¡te adoptamos!

Con todo lo dicho en la otra entrada, propongo las reglas del juego DE LA BLOGUERA INVISIBLE:

1. Que se apunte aquí la que quiera participar (¿alguna cacereña se apunta?), mientras más seamos más divertido será, pero la que se apunte debe comprometerse a regalar algo para que ninguna se quede sin nada, y todas podamos encontrarnos con la ilusión de abrir nuestro paquetito "virtual".

2. Me gusta también la idea de María Sur: "que aparte de fijar el gran día de la entrega de regalos (que efectivamente como dice Cris, podría ser el 24), nos pasábamos los días previos ocupándonos, “discretamente” (por aquello de la invisibilidad) y de una manera más especial, de esa compañera que nos hubiera tocado, véase ser más amable con ella, ayudarle con las mates o con la geografía, jugar con ella en el recreo aunque no me cayera muy bien, etc… (¡esas cosas que aprendimos las que fuimos a coles de monjas!); también por qué no, ponerle unas "chuches" en su pupitre, dejarle una notita en su cartera, etc, etc… así que yo creo que podríamos hacerlo igual, osea que desde el día de la cena podríamos empezar a "agasajarla" como mejor creamos… ¿qué os parece?". De esta manera será más divertido, no sólo por esas pequeñas pistas que se van a ir dejando, sino porque -estoy segura- que alguna mala malísima también jugará al despiste, haciendo el juego más intrigante.

3. Se preparará un "árbolito navideño virtual" en el blog para que cada una cuelgue su regalito, que puede ser cualquier cosa, como bien ha dicho Marga: "Se me ocurren montones de cosas para regalar: citas, poemas, vídeos, cuadros, artículos, webs... además todas vamos a disfrutar de los regalos de las otras".

4. Cerraremos las confirmaciones el día 2 de diciembre, y una mano inocente (ya la buscaremos, en algún lado habrá una mano inocente ¿no?) sacará los nombres y a cada una le llegará a su correo electrónico particular el nombre de su "bloguera invisible". Así, en la cena ya sabremos quién nos ha tocado, y podemos empezar a ponerle la servilletita para que no se manche con los canapés, acercarle la silla cuando se levante al baño y untarle el paté en el panecillo. Seguro que esas miraditas de reojo para adivinar a quien le hemos tocado animan también la cena.

5. Este será un juego independiente del "tradicional" que se haga en la cena, o sea que algunas jugaremos dos veces al amigo invisible y podremos agasajar a dos de nuestras compis de lectura ¡qué generosidad navideña! ¡paz a las blogueras de buena voluntad!

Os animo a participar, yo creo que puede resultar muy divertido, una nueva manera de regalar en la que el límite de precio lo pone la imaginación de cada una, y en realidad todas seremos beneficiarias de los regalos que se hagan, o sea, que recibiremos más de lo que regalemos (el egoismo también existe en Navidad ¿no?) ¡jo, jo, joooo!.

Discover Pecos!