lunes, 1 de diciembre de 2008

LECTORAS CON ARTE DICIEMBRE, FELICE CASORATI

Diciembre. Otra vez tenemos aquí las Navidades, tendremos que envolvernos de nuevo en guirnaldas rojas y verdes, llenar nuestras casas de adornos que recuerden esta fecha tan especial en cualquier rincón de nuestra casa y vivir por y para ellos, los niños.

Es bonito vivir la Navidad a través de sus ojos, sentir la ilusión de la sorpresa, de los misterios que llenan sus vidas de jolgorio... Mamá, si cerramos las ventanas ¿por dónde entrarán los camellos?... ¿mamá, tú crees que el abuelo también me traerá un regalo?...

Y tú, intentando alargar su infancia, finges. Finges para que vivan con plenitud la magia que perderán en unos años, y buscas los rincones más recónditos para esconder la barbie o el coche de carreras, y pones tus zapatillas con las suyas al pie del árbol, justo al lado de las tres copitas de anís y la bandeja de polvorones y piñonates con los que repondrán fuerzas los Reyes Magos antes de irse volando a otra casa.


Y recuerdas cómo eras tú cuando también pensabas que la magia existía, cómo era ese runrun en el estómago al acostarte sabiendo que tu casa sería invadida por camellos y por unos señores de largas barbas y ricos vestidos, que quizás se asomarían a tu cuarto para ver si dormías. A veces hasta oías sus pasos por los pasillos, rumor de babuchas arrastrándose para no hacer ruido, chisporreteo de papel de celofán... Cerrabas muy fuerte los ojos para que no se fueran y apretabas las sábanas con nerviosismo, deseosa de que llegara el día, y poder, por fin, levantarte para ver si habías sido buena y te habían traído todo aquello que deseabas. Y en cuanto amanecía ya estabas saltando sobre la cama de tus pobres padres, más ojerosos que de costumbre, obligándolos a acompañarte al salón mientras gritabas ¡han llegao! ¡han llegao!! ¡mira, mamá, lo que me han traíooo! Y allí estaba la magia: se habían comido los polvorones y los piñonates, se habían bebido el anís, y a cambio: ¡allí estaba mi Nancy vestida de princesa! ¡Gracias Melchor!


Pues eso, para estas fechas en la que los niños son los verdaderos protagonistas, he elegido un cuadro de un pintor italiano, Felice Casorati, "Niña sobre alfombra roja".



Felice Casorati es un pintor al que he descubierto gracias a mi búsqueda detectivesca de cuadros de lectoras con arte para este blog, y que me ha encantado por la enigmática atmósfera que se desprenden de sus cuadros y que ahora quiero compartir con vosotras.


Felice Casorati (Novara 1886-Turín 1963) provenía de una familia de matemáticos y científicos famosos. Pasó su infancia en Milán, Reggio Emilia, Sassari y en Padua, donde se dedicó a los estudios musicales con tanta intensidad que fue víctima de una crisis nerviosa a los 18 años. Durante un período de reposo comenzó a pintar cuando su padre, que era aficionado a la pintura, le regaló una caja de colores.


En 1906 se graduó en derecho en la Universidad de Padua, sin embargo decide dedicarse a la carrera artística. Retrato de una dama, una elegante imagen de su hermana Elvira, fue aceptada por el jurado en la Bienal de Venecia de 1907. De 1908 al 1911 estuvo en Nápoles estudiando la obra de Pieter Brueghel “el viejo” en la colección del Museo Nacional.

Sus obras se exhibieron de nuevo en la Bienal de 1909 y 1911, y en esta ocasión quedó muy impresionado por la sala dedicada a Gustav Klimt. Su simbólico y decorativo estilo influyó en su obra posterior. Entre 1911 y 1915 vivió en Verona y fue uno de los fundadores, en 1914, de la revista Vía Láctea, en la que colaboró con ilustraciones de estilo art nouveau.

Se alistó al ejército en 1915. Al morir su padre, en 1917, se trasladó con su familia a Turín, y pronto se convirtió en una figura central de los círculos intelectuales de la ciudad. Mantiene relaciones de amistad con el compositor Alfredo Casella y Piero Gobetti, uniéndose en 1922 al grupo "Revolución Liberal". En 1923, por su amistad con el anti-fascista Gobetti, fue arrestado y pasó unos pocos días en la cárcel. Tras este episodio evitó entrar en conflicto abierto con el régimen. En 1921 abre en Turín una escuela de pintura para jóvenes, una experiencia completamente nueva y lejos de cualquier forma sistemática de la academia.

En sus obras de madurez, en el período posterior a la guerra, sustituirá los elementos decorativos por la meditación de una forma esencial, influenciado por la construcción matemática del espacio de la pintura XV y, en particular, por la atmósfera de inmovilidad típica de Piero della Francesca.

La pureza cristalina y el tono de las enigmáticas composiciones de Casorati han contribuido a esbozar el realismo mágico. Durante los años veinte tomó la iniciativa en la vida cultural italiana.

En 1930 se casó con Daphne Maugham, alumna de su escuela desde 1926; su hijo Francisco también fue pintor. En 1925 fue uno de los fundadores de la Sociedad de Bellas Artes Antonio Fontanesi, que promovía exposiciones de artistas italianos y extranjeros contemporáneos. Su amistad con el industrial y coleccionista Riccardo Gualino alentó el interés de Casorati por el diseño de interiores. En 1935 el estudio de Casorati y Enrico Paulucci acogió la primera muestra de arte abstracto italiano, con obras de Licini, Melotti y Fontana. Casorati ganó el premio de pintura en la Bienal de Venecia en 1938. Recibió también el reconocimiento oficial de las grandes exposiciones en París, Pittsburgh y San Francisco. Es particularmente activo en la creación de conjuntos y trajes para el Teatro de la Ópera de Roma, La Scala de Milán y el Mayo Musical Florentino. Alcanzó una gran fama.

Espero que esta niña, un tanto apática, tumbada sobre la alfombra y rodeada de juguetes y regalos (entre los que se encuentran algunos libros) os inspiren esas historias con las que tanto disfruto. Seguro que si cerráis los ojos con fuerza también os veréis sentadas sobre una alfombra, en una Navidad que fue para vosotras inolvidable. Espero que una a una vayáis dejando aquí vuestras historias, desparramadas por esta alfombra que es el blog. Yo ya tengo otra vez el runrun en el estómago... ¡qué nervios! ¿qué palabras me traerán mis Reinas Magas?




10 comentarios:

Maria-Norte dijo...

Estoy feliz, como mi padre. Tengo de todo, libros, muñecas, flores, cofres, abanicos, aquí en esta alfombra roja estaba pensando que es lo que quería para regalo de Navidad.
Soy una adolescente de 53 años, tengo trabajo, amor, amigos, alegría, salud, familia maravillosa, ganas de vivir y lo que tengo este año son ganas de jugar. Quiero tener una amiga invisible que me sorprenda, quiero ser anónima para hacer bromas, quiero saber quién va a ser mi agasajada para pensar en que sorpresa agradable puedo hacerla. También quiero aprender mas de arte y de literatura y de escultura y de música. Quiero aprender nuevas técnicas para ver si soy capaz de hacer una animación ó colgar un vídeo ó una canción.
Quiero poder estar en contacto con gente con la que aprendo todos los días a pesar de estar lejos.
Quridos Reyes Magos quiero seguir siendo partícipe de este blog.
Este año he sido muy, muy buena y espero que me concedais este regalo.
Sin mas se4 despide atentamente.
Maria-Norte

Cristina dijo...

¡Me encanta el perrito! ¡Estaba tan mono bajo el árbol con su lacito azul!

Mamá estaba muy enfadada, lo quiere regalar, pero a mí no me ha importado que destrozara todos los regalos que había antes de que nos despertáramos. La verdad es que la muñeca está horrorosa sin pelos y sin ropa, y el libro no hay quién se lo lea, con todas las páginas arrancadas, pero… ¡Tom Sawyer! Mi hermano seguro que no lo pensaba leer… el abanico de la abuela todavía se puede usar, tiene sus dientes marcados en la madera pero funciona, y la caja de puros de papá no la ha tocado, aunque del ramo no queda ni una flor entera y al joyero de mamá le falta una pata, pero… ¡es tan mono con su lacito azul!

Pilar dijo...

-Marina, ¡qué pastas tan deliciosas! ¿Dónde las compras?
-¿Te gustan, querida? Han abierto una pastelería magnífica al lado del Palazzo Grossi frente al salón de nuestro modisto. Entré ayer cuando fui a probarme el traje para la ópera que tenemos el próximo octubre.
-Yo ya lo tengo. Dios quiera que no engorde hasta entonces y tenga que llevarlo a arreglar. Giovanni es tan encantador que sé que no le importará. Por cierto, ¿viste el traje que llevaba Francesca en el cócktel que dio el embajador el pasado martes? Era una maravilla pero a la pobre le sentaba horrendamente mal. Ja, ja, ja. Carece, definitivamente, de la elegancia natural que toda dama de nuestro estatus precisa y de las buenas maneras que a los turinenses nos hace ser ¿diferentes, es la palabra adecuada?
-Ya sabes como son los del sur. Vociferan cuando hablan y te dan esas palmadas en el hombro como si fueran vulgares campesinos. No tienen solución. Ven, querida amiga. Acércate que te diga un secreto. (Susurrándole al oído) ¿Sabes lo que me dijo esta mañana nuestra querida duquesa de Fornociole? Por favor, no lo comentes a nadie. He prometido no decirlo. No te lo vas a creer: Marina Rusgo está teniendo un affair con el socio de su marido. ¿Te imaginas? La mosquita muerta de Marina. Tan discreta, tan refinada, tan asquerosamente rica, tan… puta
-Roberta, no digas palabrotas, la niña puede escucharte.
(Dirigiéndose a su hija, sentada en uno de los ángulos del inmenso salón) Mi amor, son ya casi las cinco y tu profesora de piano está a punto de llegar. ¿Por qué no vas a la cocina y le dices a Daniela que te prepare un tazón de leche bien caliente y esperas allí a la señorita Benedetto?
-Mami, me prometiste jugar conmigo un ratito. Siempre me prometes jugar conmigo un ratito y ese ratito no llega nunca.
-Oh, vamos, mi amor, no me seas pamplinosa. ¿Acaso no estoy contigo ahora? ¿No te leí un cuento de buenas noches la noce pasada? No me seas injusta, hija mía.
-Sí, lo hiciste. Porque estabas en casa y era el día libre de la señorita Rosco. Mamá, por fav…
-Por favor, tú, cariño, no me hagas enfadar. Está aquí nuestra querida Roberta. ¿No querrás que piense que eres una niña entrometida y maleducada, ¿verdad? Vamos, ve a pedirle ese tazón de leche a Daniela. (La niña abandona la estancia con paso desaganado). Oh, estos niños. Tienen de todo, absolutamente de todo y, aún así siempre están arañandote tiempo. La maternidad es una labor agotadora, ¿no crees? Esta mañana se dejó decirme que quería ir las próximas vacaciones con Rafael y conmigo. ¡Con lo felices que son los niños en la playa que, menos a Daniela, el resto del servicio los acampaña! Pero dime, dime, querida: ¿Cómo lo ha sabido la duquesa? Lo sabía, lo sabía; no me preguntes por qué pero lo sabía. Y la muy descarada con esa carita de niña buena. Desde que mi querido Rafael tuvo lo que tuvo con la innombrable y que tanto me hizo sufrir hasta que decidió inteligentemente volver al redil huelo como un perro de caza a las infieles. Ah, esta niña. ¡Es tan insufriblemente pesada!. Cambiemos de tema. La oigo acercarse.

Cristina dijo...

-Qué aburrimiento... me adormece escucharlas, cuchichean sin parar, y siempre hablan de amantes... tú también te aburres, ¿verdad perrito lindo?... ¿en qué consistirá eso de ser amante? suena tan exótico... ¿será más divertido que ser esposa?, seguro, porque dice Roberta que es asquerosamente rica... asquerosamente rica... ¿te imaginas, perrito?... affaire... es una palabra muy bonita... tengo que aprender francés... yo de mayor quiero ser amante...

Se lo voy a decir a mamá antes de irme a la cocina con Daniela... ¡Mamáaaa...!

Anónimo dijo...

¿Sabes? Necesitaba estar un rato a solas,...no puedo más con tanta pena. Sé que a él no le gustaría que su querida niña también le llorara, ni siquiera a escondidas...
Prometo que cada vez que me acuerde de él sonreiré; sonreiré para no perder ni una pizca de toda la alegría que me regaló a cada instante...
Y, y, y cada noche le leeré un cuento...¿por cuál empezamos?

Anónimo dijo...

¡Grande Pavarotti!.Alguien dijo de sus interpretaciones del Nessun Dorna de la opera "Turandot" de Puccini:"La belleza y la armonia unidas para deslumbrar nuestra alma".
Y Cristi me ha deslumbrao a mí..!!
(¡quilla, mamocionao!)

Anónimo dijo...

¡maría sur, cuidadín!...vale que te guste, pero no te dejes amilanar ni por el Luciano éste ni por cierto comentarios...

Tuyos para siempre.Los Pecos

Maria-Norte dijo...

¿ Pero que les pasa? ¿ No se dan cuenta de que ya no soy una niña?. Me siguen regalando muñecas y yo quiero personas de verdad, me ragalan libros infantiles y yo quiero lecturas románticas y de aventuras y de vida y de viajes y de poesía. Me tienen encerrada en casa y yo quiero salir y ver y espiar y aprender. Me regalan cofres para las joyas de la Barbie y yo quiero un reloj para poder disponer de mi propio tiempo Y no quiero estar sola, quiero conversar y compartir. Hoy me puesto unas medias para que se den cuenta.
¿ Porque es tan dificil el momento
en el que ya no tienes edad para calcetines pero tampoco tienes edad para pantys?
Maria-Norte

Cristina dijo...

Qué pena, ya ha pasado todo... tanto tiempo deseando que llegara la Noche de Reyes y ahora me doy cuenta que lo más divertido era imaginar cómo sería. Era más bonita la espera que estos regalos que me han dejado.

¿Por qué será tan divertida la espera? ¿Por qué me gustarán tanto las sorpresas? En mi imaginación la muñeca era más bonita de lo que es, el libro mejor ilustrado, el joyerito más grande...

La imaginación es el mejor de los regalos, ahora me doy cuenta. El año que viene la incluiré en mi carta: “Querido Melchor: como este año he sido buena, quiero que me traigas imaginación, pero mucha mucha imaginación, tanta, que me dure toda la vida...”

Pilar dijo...

Pobre niña rica. Eso es lo que soy: una pobre niña rica con una madre que me ignora y un padre cuyos negocios le han robado la paternidad que me corresponde