miércoles, 1 de septiembre de 2010

STEINBECK y las uvas de la ira estival

"En las almas de las personas las uvas de la ira se están llenando y se vuelven pesadas, cogiendo peso, listos para la vendimia"


Yo he conseguido que maduren varios racimos de ira entre mis compañeras de sombrilla, Adela y Marió, porque he terminado la lectura de nuestro libro en un tiempo record, de hecho hay una foto que demuestra que estuvieron a punto de vendimiarme cortándome el pescuezo en un ataque de ira (no la puedo descargar porque no tengo el cablecito de la cámara... ¡pero la pondré para que veáis cómo es la envidia de mala!). Todos los días registraban mi bolsa de playa para esconderme el libro, incluso un día ví como intentaban enterrarlo en la arena con las palas y el rastrillo de Blanca, la niña de Marió. Hoy mi libro está sano y salvo aunque sus páginas guardarán para siempre la ondulación de la humedad salina y restos de arena entre sus páginas... En fin, que a pesar de esas inundaciones y sequías, hoy puedo decir con orgullo que tengo mis deberes hechos y ha llegado el fin de mi éxodo.



Creo que las he compensado, organizando para ellas esta noche, nuestra última noche de veraneo, una sesión de cine club en un marco incomparable de esta costa puntaumbrieña, bajo la luna, al arrullo de las olas y del tintineo de los hielos de un gintonic, para ver la película y disfrutar con Henry Fonda... ¡a ver si fermenta su ira en un delicioso licor! ¡Brindaremos por vosotras, queridas compañeras de éxodo!


*********************************


John Earnest Steinbeck (nacido el 27 de febrero de 1902 – fallecido el 20 de diciembre de 1968) fue un escritor estadounidense que desempeñó dicho papel a mediados del siglo XX y cuyas obras describen a menudo al estado de California.

Nació en Salinas, California, su padre, John, era tesorero, y su madre, Olivia Steinbeck, profesora. Tenía tres hermanas. Estudió en Salinas y luego en la Universidad de Stanford. Desempeñó distintos trabajos durante su juventud, como bracero y recolector de fruta, en 1925 abandonó sus estudios y se marchó a Nueva York. Trabajó por un período breve en el New York American, pero regresó a Salinas en 1926.

En 1929 escribió su primera novela, La Copa de Oro, una historia de ficción histórica basada en la vida del pirata galés del siglo XVII Henry Morgan, que no tuvo éxito. En 1930 se casó con Carol Henning y se trasladó a Pacific Grove, donde conoció a Edward Ricketts, un marino biólogo, con quien tuvo una gran amistad.

En 1932 publicó Las praderas del cielo, un conjunto de historias situadas en la ciudad de Monterrey. En 1933, publicó El poni rojo y A un Dios desconocido, la historia de un granjero cuyas creencias en el culto de la fertilidad pagano le llevan a sacrificar su propia vida durante una época de terrible sequía.


En 1934 muere su madre, y su padre en 1935. En ese mismo año escribió Tortilla Flat, un relato entre picaresco y romántico sobre los emigrantes mexicanos establecidos en los alrededores de Monterrey (California), con el que recibió su primer premio literario, La Medalla de Oro para la mejor novela escrita por un californiano, concedido por el Commonwealth Club of California. Este compendio de historias humorísticas obtuvo cierto éxito. Consiguió amistad con su editor, Pascal Covici.

En 1936 publica De ratones y de hombres y Hubo una vez una guerra, donde narra la historia de una huelga de recolectores de fruta. Sus obras adquirieron mayor seriedad. Fue galardonado con el New York Drama Critics Award. Después de El valle largo en 1937 y La fuerza bruta, reportajes sobre los trabajadores inmigrantes en 1938.


En 1939 publicó Las uvas de la ira, considerada su mejor obra. El libro tuvo éxito, pero los críticos le reprocharon por no usar un lenguaje desarrollado, y llegó a estar prohibido en varias ciudades de California. En 1940, cuando fue adaptado al cine, recibió el premio Pulitzer.


En 1952 publicó Al Este del Edén, que sería llevada al cine por Elia Kazan, protagonizada por el malogrado James Dean. Tal vez por la repercusión que estas dos novelas alcanzaron tras ser llevadas a la gran pantalla, se consideran sus obras cumbre. Recibió el premio Nobel de literatura en 1962. Murió el 20 de diciembre de 1968 en Nueva York.

A lo largo de su vida, John Steinbeck usó el símbolo Pigasus (de pig, cerdo en inglés y Pegasus), un cerdo volador, “atado a la tierra pero aspirando a volar”.

ENLACES:
-LAS UVAS DE LA IRA (guía de lectura)
-el amor en las uvas de la ira

promolibro







os dejo este enlace para que veáis unas fotos buenísimas

14 comentarios:

Maria-Norte dijo...

Que bien que llega Septiembre con sus uvas y todo lo demas¡¡¡, esto ha estado muy solito.

Fabuloso el enlace con la guía de lectura.

Yo también tengo los deberes listos, pero no puedo ir a la cena.

Anónimo dijo...

¿No tenían nada mejor que hacer que andar rebuscando en el bolso y/o enterrarte el libro en la arena?
¿No habría sido más enriquecedor dedicar ese precioso tiempo en leer "su" libro y no dar pol saco?
¡Cómo son eas primas! Dios las cria y ellas se juntan! Menos mal que a ti te va la marcha, que si no...
Ya me hubiera gustado a mi estar ahí viendo la peli aunque no tintineando mi gintonic por aquello de ser abstemia, aunque bien hubiera podido tintinear cualquier otra cosa, desde un vaso de agua, un refresco cualquiera, unas campanillas, unas borlitas de la tela del sofá del porche, unas canicas... ¿Será problema de tintinear lo mío?
Mi querida Maricristi, por motivos que no vienen a cuento y que serían laaaaaargos de explicar, yo aún no he hecho mis deberes, lo cual no significa que no los haga para el día de la cena. Es más, como que me voy yendo no sea que no me dé tiempo.
¡¡¡AH!!! ¿He dicho que tengo ganas de ver al grupito? Besitos para los que lo lean. CIAO!

Anónimo dijo...

La anónima soy yo, que por motivos que se escapan a mis tecnológicos deditos no me quiere identificar esta maldita máquina

Anónimo dijo...

¡¡QUE SOY PILAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAR!

Anónimo dijo...

Ay, ay, ay que tendrá Santa Clara que todas acuden a ella¡¡¡¡

una que aclara lo de Santa Clara dijo...

Santa Clara nos aclara las dudas, nos hace ser preclaras... y claramente te digo (¿por qué no decirlo?) que aquí los pisos están más baratos que en el centro (o que en Triana)

Marga dijo...

Cristina: acabo de disfrutar la entrada, los enlaces y la promoción del libro, ¡esto sí que es una "vuelta al cole" por todo lo alto!

Marga dijo...

...pues yo no me aclaro con las aclaraciones de la aclaradora. ¿O es que la cántabra se cambia de barrio?

la víctima dijo...

¡arriba os dejo la prueba del intento de cristinicidio!

maria sur dijo...

Además de “cristinicidio” he encontrado en este viaje a California otras palabras que han llamado mi atención:

P.57...le dio un SACUDIÓN como un gato a una rata (Sacudida rápida y brusca)

P.93...y allí había un gran AZAFATE de panecillos (Canastillo, bandeja o fuente con borde de poca altura)

P.101...¿No es un redomado BERGANTE? (Pícaro, sinvergüenza)

P.110...Quédese también con la JÁQUIMA bordada de flores (Cabezada de cordel, que suple por el cabestro, para atar las bestias y llevarlas)

P.196...Y pasteles en GAYOLAS de alambre (jaula)

P.222...se limpió la mano con un trozo de HARPILLERA (arpillera)

P.300...Y BALADRONEÓ un poco porque estaba triste (Fanfarrónear)

P.519...Comeremos MAZAMORRA de harina (Comida semejante a las gachas, hecha a base de maíz, y preparada de diversas formas según los lugares de América)

P.545...Podríamos comer PANQUEQUES calientes (Tortita que se hace con masa de harina, yemas de huevo batidas y un poco de leche)

Cristina dijo...

¿A que otra vez tenemos ediciones diferentes?... la mía es de Alianza Editorial, traducción de María Coy Girón, ¡y no tengo sacudión!

Sin embargo tengo otras:

Ha estado manejando un pico, un hacha, o una ALMÁDENA... (20)
(Mazo de hierro con mango largo, para romper piedras)

Y allí espiamos a un negro con un gatillo más grande que la PROBÓSCIDE de un elefante... (21)
(f. Zool. Aparato bucal en forma de trompa o pico, dispuesto para la succión, que es propio de los insectos dípteros)

y una COLLERA de mulas (65)
(De cuello. f. Collar de cuero o lona, relleno de borra o paja, que se pone al cuello a las caballerías o a los bueyes para que no les haga daño el horcate)

con las roscas ENROBINADAS (65)
(Cubrirse de robín, enmohecerse)

Mira bien que la liebre no tenga ningún DIVIESO (79)
(Tumor inflamatorio, pequeño, puntiagudo y doloroso, que se forma en el espesor de la dermis y termina por supuración seguida del desprendimiento del llamado clavo).

soltando la ESTEVA para dejarse resbalar por una roca (179)
(De *stēva, forma dialect. del lat. stiva. 1. f. Pieza corva y trasera del arado, sobre la cual lleva la mano quien ara, para dirigir la reja y apretarla contra la tierra / 2. f. Madero curvo que en los carruajes antiguos sostenía en sus extremos las varas y se apoyaba por el medio sobre la tijera).

Frotaré bien el arco de la COLOFONÍA... (499)
(Del lat. colophonĭa, y este del gr. κολοφωνία). 1. f. Resina sólida, producto de la destilación de la trementina, empleada en farmacia y para otros usos.

los insectos, las ROYAS, las plagas... (524)
(Enfermedad de algunos árboles en los que el centro del tronco se convierte en un polvo rojo negruzco).

Y los niños agonizando de PELAGRA... (528)
(Enfermedad con manifestaciones cutáneas, digestivas y nerviosas, producida por falta de vitamina B1 en la alimentación)

maria sur dijo...

¡Pues imagínate!...Tu editorial aún no había sido fundada, ni tu ni yo habíamos nacido cuando el que yo tengo debió ser leido en mi casa cuando estaba a punto de finalizar el año 1957...De ediciones Luis de Caralt. Y traducido por Hernán Guerra Canévaro, que si no me equivoco debió elegir “jáquima” cuando vió tu “collera” ¿no?

Cristina dijo...

pues tu jáquima parece más mona que mi collera ¿no?... en la peli no se veía ná con flores ¿o será que sólo me fijé en los ojos de Henry Fonda?...

Tendría yo que dedicarme a ordenar la biblioteca de mi padre para "resucitar" todos sus libros, aunque he hecho varios intentos de leerlos y creo que necesitaría un microscopio porque la lupa se me queda corta... En su momento, cuando vivía con ellos, se los ordené por orden alfabético (ya sabéis mi manía) pero con los sucesivos plumeros los han ido desordenando.

Cristina dijo...

al final de la entrada os dejo unas fotos que me han mandado. Son de 1939-1943 pero os recordarán a lo que hemos leído en el libro de Steinbeck.