jueves, 23 de junio de 2011

RECOMENDACIONES DE JUNIO

MARGA PROPONE:
Monólogos de la vagina, de EVE ENSLER, Ed. EMECE


¿Qué tienen en común Susan Sarandon, Whoopi Goldberg, Melanie Griffith y Winona Ryder? Todas ellas, además de otras reconocidas actrices, han subido al escenario a interpretar Monólogos de la vagina. Esta obra, que en 2001 fue elegida en Estados Unidos para abanderar la lucha contra los malos tratos a mujeres, es el resultado de las entrevistas que Eve Ensler realizó a más de doscientas mujeres para escribir sobre su obra teatral del mismo título. "Estaba preocupada por las vaginas. Me preocupaba lo que pensamos sobre la vagina, y aún más que no pensáramos sobre ellas. Así que hablé con más de doscientas mujeres, hablé con mujeres mayores, jóvenes, casadas, solteras, lesbianas, profesoras universitarias, actrices, ejecutivas, prostitutas, norteamericanas, afroamericanas, asiáticas, hispanas, blancas y judías. Al principio se sentían cohibidas. Pero una vez que se animaban, ya no había forma de pararlas".
Eve Ensler es autora teatral y guionista; esta obra tuvo un gran éxito en Off-Broadway y se ha representado en todo Estados Unidos, así como en Jerusalén, Zagreb, Londres, Madrid y Barcelona. En todas partes donde se ha representado ha cosechado un enorme éxito de público.




CRISTINA, aunque se rompa la regla de no repetir autor, recomienda:


LOS PERROS Y LOS LOBOS de IRENE NEMIROVSKY,
Ed. SALAMANDRA
Publicada por primera vez en 1940 —año en que Irène Némirovsky huyó de París en compañía de su marido y sus dos pequeñas hijas para refugiarse en un pueblo de la Borgoña—, ésta es la última obra que la autora de la magistral Suite francesa publicó en vida, dos años antes de su deportación y asesinato en Auschwitz. Teñida de marcados ecos autobiográficos, la novela se construye con retazos de la infancia y del exilio, la crisis de identidad, las historias de amor, todo sujeto a los azarosos caprichos del destino.
Ada y Harry Sinner, parientes lejanos, son dos jóvenes judíos procedentes de niveles sociales muy distintos a quienes un recuerdo infantil ha dejado una huella imborrable en sus vidas. Ada abandonó Ucrania poco antes de la revolución bolchevique, se ha casado con su primo Ben y lucha por abrirse camino como pintora. Harry, por su parte, ha contraído matrimonio con una joven francesa, hermosa, rica y católica, y se mueve en el mundo de las altas finanzas. Pero la fascinación que siente al contemplar dos cuadros de Ada en un escaparate lo llevan a recordar el mundo que ambos han dejado atrás.
Con su destreza habitual para el retrato psicológico, Némirovsky delinea con claridad el torbellino de sentimientos de un clásico triángulo amoroso. Al hilo de los apasionados personajes, el relato transporta al lector desde Ucrania hasta el París de los años veinte, y la tensión narrativa crece sin cesar hasta la conclusión del relato.


MARÍA DEL MAR dice que le ha gustado mucho:
El extranjero, de Albert Camus
Sobre todo a partir de su novela El extranjero, al autor franco-argelinoAlbert Camus se lo asoció al existencialismo, movimiento filosófico cuyo principal representante es Jean-Paul Sartre. Sin embargo, Camus se negó a sí mismo esta etiqueta, declarando que tanto a él como a Sartre les resultaba sorprendente que ambos nombres fueran citados juntos con tanta frecuencia.
Y sin embargo, el drama que Camus narra en El extranjero es el drama de la existencia humana desolada, el aislamiento del mundo y de los contemporáneos, y de una humanidad partida en dos por la II Guerra Mundial. También es una crítica a una sociedad que cataloga a sus individuos según un sistema de rígidos principios morales. Y en la que aquel que no entra dentro de los patrones establecidos, debe ser liquidado.
El protagonista de El extranjero –y el narrador en primera persona- es Meursault, un oficinista que deja transcurrir una existencia sin demasiados sobresaltos en Argel. La novela comienza con la muerte de su madre, hecho que Meursault toma con naturalidad, cumpliendo con su deber de asistir al funeral aunque sin sentir tristeza ni ningún otro sentimiento. En efecto, Meursault no experimenta las emociones habituales en otros seres humanos. Se mueve con apatía y neutralidad en sus citas con María, en su trato con los vecinos, caminando por la calle. Todo en la vida le da lo mismo.
Un día, Meursault comete un crimen. No tiene un motivo concreto para haberlo hecho –más que el brillo del sol que tanto lo molestaba- pero debido a su falta de emociones es incapaz de discernir el bien y el mal. La sociedad lo condenará, no tanto por el asesinato, sino por sus atributos que lo diferencian del resto de las personas.



Pililebe, en una notita, nos ha dejado esta recomendación:
La palabra más hermosa de Margaret Mazzantini. Ed. Lumen
Nada puede silenciar la palabra más hermosa.
Con una escritura de inconfundible identidad literaria, Margaret Mazzantini nos regala La palabra más hermosa, una novela eficaz, apasionante como un thriller y sabia como una parábola. Una mañana Gemma decide volver a Sarajevo con su hijo Pietro, en busca de un pasado que cree conocer. Allí la espera Gojko, un viejo amigo y poeta bosnio, con el que en 1984 conoció a un fotógrafo llamado Diego, la pasión de su vida. Como todos los amores verdaderos, la historia de Gemma y Diego no es perfecta pero su intensidad va más allá del tiempo y de la Historia con mayúscula.





PERO GANA OTRA PROPUESTA DE CRISTINA,
para reírnos con su lectura y descubrir el lado divertido de John Steinbeck, que también lo tiene el hombre... ¡no iba a estar todo el día tomando uvas de la ira!

(puestas a recomendar, os aconsejo que compréis el de la editorial Navona):
Tortilla flat, de John Steinbeck, ed. Navona

En las colinas de Monterrey, en medio de los bosques de pinos, se asientan las cabañas de madera de Tortilla Flat. Allí viven los paisanos, mezcla de indios, hispanos y diversas razas caucásicas, un grupo de hombres y mujeres ajenos a los vaivenes mercantilistas y a las normas de la sociedad más respetable. Danny y sus amigos, pícaros modernos capaces de todas las trapacerías, pero dispuestos siempre a ayudar a los demás, pasan su existencia entre borracheras, peleas y vagabundeos hasta que la inesperada herencia de una casa viene a poner un poco de orden en su salvaje libertad de paisanos. La casa de Danny habrá de convertirse en depositaria de un talismán que no es otro que la camaradería y, con ella, un ideal de caballeresca generosidad.
Divertida y tierna, llena de situaciones cómicas e impregnada de un hondo lirismo, esta novela, publicada en 1935, fue el primer gran éxito literario de John Steinbeck. Al igual que otros relatos de este autor, fue llevado al cine en 1942, bajo la dirección de Victor Fleming y con Spencer Tracy, Hedy Lamarr y John Garfield como protagonistas.


LA EDICIÓN DE NAVONA (contada por ellos mismos):
Para esta nueva traducción de Tortilla Flat (que recupera el título original de la novela y trata de corregir los errores de anteriores versiones) nos hemos basado en el texto de la edición inglesa de Penguin de 1950. Traducir, ya es un tópico repetirlo, implica traicionar en cierto modo el estilo y las intenciones del autor. Hemos intentado respetar uno y otras hasta donde ha sido posible, dejando fuera, no obstante, algunos rasgos que pudieran tener su importancia. Me referiré tan sólo a uno: los giros arcaizantes (mezcla de dialectalismo y afectación formal) que los personajes utilizan ocasionalmente en sus conversaciones: “Vos sois, vos tenéis”... Los registros castellanos con los que pretendimos reproducirlos (un voseo como el argentino o un lenguaje cercano al habla del Siglo de Oro) no resultaban naturales y podían representar un estorbo para el lector. Finalmente, se impuso obviar esos matices que, no obstante, quedan implícitos en el tono y contenido de los diálogos.
Se han respetado, en cambio, las numerosas expresiones chicanas, propias del marco fronterizo en que se desarrolla la obra y que tan bien conocía John Steinbeck, oriundo de la cercana Salinas, “una bonita ciudad”, como afirma Jesús María Corcorán, “ese dechado de humanismo”.
Pero acaso no tan bonita como la propia Tortilla Flat.

No hay comentarios: