jueves, 16 de septiembre de 2010

Acta de la Cena de Septiembre

ACTA DE LA CENA DE SEPTIEMBRE


Queridas compis de Hoy Libro:

Como la cena de este mes ha sido un poco atípica no me voy a extender mucho.

Mi invitada y amiga se llama Fátima y me ayudó muchiiiisimo en la preparación de la mesa, le quiero desde aquí dar las gracias, fué una grata compañia y yo sé que fué un gran esfuerzo para ella por un problema personal, pero allí estaba ella, tan guapa como siempre y con su maravillosa sonrisa aunque a media luz. Un beso fuerte. Y además nos hizo un regalito a cada una monísimo (ver fotos). ¡¡¡GRACIAS FATIMA!!!

Los comentarios al libro "Las uvas de la ira" de John Steinbeck seran sin especificar nombres, así nunca se sabrá quien no lo ha leido.

En general el libro ha gustado mucho, nos ha enganchado, tiene mucha fuerza, te hace tragar polvo y vivir un viaje interminable en unas pésimas condiciones. Algunas han visto la película y nos la han comentado un poco, comparándola con el libro.

Es verdad que es muy actual y nos recuerdan situaciones de nuestra economía, la crisis, los abusos, la explotación.... las huelgas, los piquetes ...Hace 60 años la relación de los bancos, de la agricultura... la historia se repite permanentemente.

Los personajes estan muy bien descritos y bien definidos, hace muchas descripciones lo cual te hace meterte muy bien en la historia aunque resulta pesado en algunas ocasiones dicen algunas pero a otras les han encantado. El personaje principal "la madre" es el motor, la que mantiene a la familia unida, aunque el protagonista sea Tom. (Pasa lo mismo en "Al Este del Eden"). Y los personajes secundarios, el predicador se convierte en lider, Jhon con su pena tiene bastante, Al admira a Tom y busca el amor, Rose lo pierde todo... y los abuelos.... el gasolinero...

La ira no se ve en Tom, es un buen hijo y un buen hermano, ni en los dos asesinatos que comete, son por defensa personal, tampoco en el padre, es una ira contenida, pero sí se refleja en los guardas... "En las almas de las personas las uvas de la ira se están llenando y cogen peso, listas para la vendimia".

Es una historia muy dura. Hace referencia a la supervivencia pura y dura, no pueden mostrar sus emociones (por ejemplo muerte de la abuela), parece que ni sufren ni padecen. Se siente la rabia y la impotencia de los hombres, los niños se mueren de hambre.

El lenguaje nos hace meternos en su mundo, expresa la realidad con sencillez. Fué un libro muy censurado.

El final impacta un poco, te enseña mucho, como hay que ayudarse unos a otros hasta el límite de tus fuerzas, pero en realidad esta historia no tiene final, la historia continúa...

Y el final de la cena?: si habeís visto las fotos pues imaginaros como terminó la noche...

Me despido aquí, no puedo ir a la próxima reunión porque no me da tiempo a leer el libro y pesa un poco para llevarmelo en la mochila, salgo mañana temprano empiezo en Salamanca rumbo a Santiago 500 km aproximadamente. Un beso para todas.

8 comentarios:

Cristina dijo...

Gracias por el acta, que tengas un feliz camino, y ya sabes, caminante, que no hay camino, se hace camino al andar...

Y gracias también por tu invitada, que nos llenó de iones positivos y de sabios comentarios.

Le aclaro a María Norte que las conchitas que colgaban de nuestros cuellos de jirafa eran un regalo de ella, de Fátima, que las trajo de una playa gallega cuyo nombre no recuerdo y que nos contó que estaban cargadas de iones positivos, ideales para combatir las uvas de la ira.

LA ENCUESTA dijo...

hola, tengo yo que decir que este mes me han tocado los botoncitos seis lectoras, a 4 de ellas el libro le ha parecido MUY BIEN, y a dos simplemente BIEN...

LA DE LA DUDA METÓDICA dijo...

¿ATÍPICA? ¿POR QUÉ FUE ATÍPICA VUESTRA CENA? ¿ME LO PUEDE EXPLICAR ALGUIEN?

María MD dijo...

Leo a Steinbeck: ”Y los mundos se construian de noche. La gente llegando desde el camino, los hacia con sus tiendas y sus corazones y sus cerebros” y pienso en nuestras cenas, a donde llegamos cada una con “ lo nuestro”...Para mí un placer, y cuando llega una caminante nueva como Fátima, el placer es doble; generosa con su amiga, generosa con sus conchas, generosa con sus comentarios y generosa con sus sonrisas. ¡Gracias!

Y feliz camino, Isabel.

pilar dijo...

Pues hija, ses quien seas, fue "atípica" porque yo no me había leído libro, cosa que jamás había sucedido antes, ¡¡¡y no me importa reconocer!!! JE JE JE.

¿Y yo qué sé por qué fue atípica? A mi me pareció de lo más normal si no hubiera sido porque:

1. la organizadora esperó con su invitada y las uvas preparadas sobre la mesa un tiempito.

2. La organizadora pensó que se había quedado en un lugar para el encuentro pre-cena y en el blog se había quedado en otro.

3.Hubo más de una que no se leyó el libro. (Mea culpa por la parte que me toca). Pero esto no es la priemra vez que sucede e imagino que no será la última.

4. Hubo un preambulo un poco tirante, me dijeron, pues yo me fui al baño a hacer un pis (Juro por Snoopy y Mafalda que no lo hice a posta para escaquearme).

5. La invitada, Fátima, estuvo estupenda, trayendo regalos para cada una de nosotras hecho con sus propias manos, que tiene ese valor del mimo y la dedicación. ¡¡Y más para un puñado de desconocidas!!

6. ¡AY! ¡Qué difícil es la convivencia!

7. ¿Todo eso convirtió la cena en una cena atípica? Chi lo sá!

Anónimo dijo...

Isabel, gracias por el acta y por la organización de la cena, que con tanto comentario "atípico" se me olvidó agradecerte.

Cristina dijo...

Yo pienso que cada una de nuestras cenas es atípica. Esta lo ha sido en parte por lo que ha dicho Pilar, en otras hay invitados magníficos, en otras salen collares de perlas de los sitios más insospechados, en otras se leen cartas (ayyy, po no estoy añorando yo las cartaaaas!), en otras hay regalitos personalizados... en fin, ¡que me encantan todas nuestras cenas atípicas!

Angela dijo...

Gracias Isabel y gracias Fátima. Puntualizo uno de los puntos que argumenta mi bienamada Pilar por lo que la cena pudo ser un poco "atípica": las que nos confundimos de lugar para la precena fuimos todas las demás, no Isabel.